sábado, enero 22, 2005

Je suis… la maestra del escaqueo !

El viaje en fragoneta ha ido la mar de bien. Mayer conduce de maravilla y todo perfecto hasta llegar a un area de servicio en la que el cafe sabia a sopa aghhh. Algo debia tener que desde entonces no hemos parado de llorar... de risa claro esta. He mirado por el cristal del bar y alli estaba ella toda nueva con su letrerito de Avis... Oye Mayer... la dejamos en otra area y decimos que la han robao??? Si vale pero luego la quemamos para borrar las huellas! Cuando quedaban 150 km para Lyon digo: Les llamamos ahora y hasta que no nos digan que estan alli no vamos que son capaces de hacernos descargar los libros... Si y ellos pensaran lo mismo y nos pasamos asi hasta el jueves. Habeis llegado? Nooo hay caravana y vosotros ... tampoco hay atasco y asi hasta el jueves.

Como mis sospechas no eran infundadas al llegar our president nos espera fuera para decirnos el camino hacia el stand!!!! Como que el camino??? El primer salto que di... Avisa a Dna. Malvada que despues de todo el viaje solos NO descargamos. Al final vino la Malvi pero el presi no dio ni sello. Mientras Mayer y una servidora descargabamos ellos iban colocando cajas y libros. La realidad es que presi colocaba luces, posters, telas (vamos todo aquello que no pesase mas de 5 gramos) y la otra no se que hacia. Asi que cada viaje ibamos y volviamos muchoooo massss lentamente. Un traguito de agua? Un pitillo Mayer? Uis llueve hasta que no pare no salimos piano piano. Oye aue nos vamos al WC. Tras el ultimo viaje y con la decision de no haber replica... Ochen que Mayer y yo vamos a buscar nuestros pases... Nos vamos y media hora mas tarde (tras perdenos por stands, sin querer de verdad de la buena) aparecemos. El stand igual. No habian hecho nada. Ahora eran ellos los que se iban. Juas lo llevan claro hasta que no vengan no hacemos nada esto es la GUERRA. Despues de media hora larga aparecen y el stand igual. Bueno con una quemadura en la moqueta que no pude evitar. Encima vienen sin los pases. Mayer hablando por el movil y yo no estaba. Estaba en el WC sacandome de encima los manchurrones de la mano de la mezcla de ceniza y moqueta. Cuanta razon teniamos cuando asegurabamos que si seguiamos asi, las cajas iban a estar por alli en medio hasta el fin de la feria. Oche presi que te acompamo a buscarlos que se de un ordenador desde donde se pueden pasar (voy aprendiendo en lo del escaqueo). No Jairaki que si no no lo montamos hasta las 12 (que optimista el tio!) y encima me lo dice leyendo un periodico. Total que cuando acabamos que no encuentran taxi que se vienen con nosotros en la frago, pero claro alguien tiene que ir atras con las cajas. Como me los veia venir antes de que nadie dijese nada empiezo a cantar: pito pito colorito donde vas... senalando a la malvada y al presi huevon. Captaron la indirecta y salieron a buscar un taxi. Para no perdernos les seguimos. Iban ellos dos andando bajo la lluvia y el mayer y yo en la frago descojonaos de la risa. Hazles una foto!!!

Total que acabaron invadiendo la fragoneta y como una servidora no va detras acabamos los cuatro delante (tiene 3 plazas). Yo ya ni sabia lo que me clavaba. Aparta Jaira que tengo que quitar el freno de mano. Pues espera que me lo saque del culo. Echaros para alli que mi marido va a pensar que en vez de una fiesta he ido a un festival sadomasoquista de los morados que me van a salir. Teniamos la estrategia preparada para no ir a cenar con ellos... pero eso ya lo cuento manana que me caigo.

Por cierto el hotel es una monada. Le college todo decorado como un colegio. Las mesitas son ladrillos blancos y lo malo que las camas estan muy juntas, asi que como Malvi ronque no respondo de mis actos.


jueves, enero 20, 2005

Lyon me espera...

Estaba a las siete y cuarto de la mañana, esperando a Sufumu, con mi cafelito. Ha entrado y hemos empezado a rajar y rajar. En ese mismo instante Lara Norris y Bailarina pasaban por delante de la cristalera del bar una y otra vez. “Está mirando, fijo que nos ha visto si hemos pasado cuatro veces…”. Pues no las había visto y casi lloro de la alegría cuando al fin han desistido y han entrado.

¡Qué preciosidades! Han madrugado para verme por última vez en siete largos días. Mañana me marcho a Lyon por cuestiones laborales, un viaje que no me apetece nada de nada hacer, justo después de un congelamiento provisional de sueldo a to kiski y haber estado echando rayos y truenos por la boca contra el director de personal (no tiene la culpa, pero lo descansada que me quedé). Cosa buena: es provisional. Cosa más buena: conseguí con mis quejas que de nuevo se vuelva a cobrar por ir de viaje.

Iré en fragoneta con el Mayer (un chico de logística que cuando pasa por delante de las féminas jóvenes de la empresa canturrean –canturreamos- en voz baja Oooooosscarrrr Maaayerrrrrr). Querían mandar al pobre chaval con un camión cargadito de libros hacia gabachilandia y sin pajolera idea de francés. El pobre sudaba nada más pensarlo. Así que me ofrecí para ir de copiloto y ahorrarme el trayecto en coche con Mr. President y lo que es peor con Doña Malvada. Finalmente ellos viajarán cómodamente en avión y yo acompañada de Bunbury porque Mayer es muy buen chaval y me ha dicho que puedo llevar lo que quiera de música y ya le he advertido… Estoooo vas a tragar Bunbury, Bushido… ¡Y ha dicho que sí! Es un santo. El único fallo es que un día me dijo Sufumu que estaba subido a una escalera y le pareció ver que llevaba tanga. Desde ese día su sexapil cayó en picado para mi. Cero patatero.

Doña Malvada es de lo peorcito de la empresa. Ella misma reconoce que es mala, que no cree en las buenas personas y que no existen los corazones desinteresados. Conoció a una persona buena, su padre, y murió cuando ella tenía 12 años y nadie las ayudó, cuando él lo había hecho con mucha gente. Así que se cerró en banda desde entonces y se aplica la máxima de… el mal que puedas hacer hoy no lo dejes para mañana. Por lo menos lo reconoce, pero es de un peligroooo la mujer. Amargadita por todos los costados. Ella fue la instigadora de que se dejaran de cobrar por ir de viaje. Con este elemento me ha tocado compartir habitación. Yo, que creo que todo el mundo es bueno (y los palos que me llevo a veces) o que tiene algún motivo para no serlo, pero curable, que creo en las personas, en el positivismo y en la buena fe… Cambiarla no la cambiaré, pero espero que ella tampoco lo haga conmigo y acabe ahogándola por la noche con un calcetín (sucio a ser posible).

Voy a echar de menos:

A mi marido, porque yovi yovaa cada día le quiero más: Su calma, que hace que cuando esté nerviosa, echando chispas, me tranquilice y serene, que me haga reír y verle feliz cuando me rió y que me lo diga, que comentemos nuestras respectivas jornadas y hasta sus broncas por ser una terrible desordenada.

Mis adorables sisters e hija adoptiva Bailarina: Sus risas, sus conversaciones, sus abrazos de osos, sus mimos … todo muy reconfortante.

Mi mami (Samarkanda): Las dos conversaciones telefónicas diarias de media hora, contagiándome felicidad cuando las noticias son buenas y alegrándome también cuando confiesa su tristeza porque sabemos que no nos engaña y la podemos animar. Su… ahora estoy comiendo, ya estoy en la cama (tan prontooo?), su contadme algo más (que suena totalmente como una niña pequeña que quiere abrir más regalos de reyes). Si la llamo desde el móvil en dos días le gasto el saldo y se va a dormir muy prontito, así que cuando regrese al hotel ya irá por el quinto sueño :’(

Amig@s: Porque siempre están cuando se les necesita y son muchos días sin compartir tertulia y/o cafelito.

Internes: Porque no os podré leer a diario, aunque últimamente vaya tan liada que tengo esto un poco abandonadillo, pero a la vuelta tendré tiempo para ponerme al día.

A cambio por lo menos me llevo pasear por los puentes de sus ríos y y y… poco más se me ocurre. Lo de jartarme de foie no sé si lo podré ni si quiero hacerlo después de leer lo que Marmi escribió sobre el tema… Ah sí que podré volver a ver a Adrià :) Alucinada me quedé hace dos años cuando dos finlandeses que ni papa de español se gastaron cada uno 120 euros en un libro que no entendían para que se lo dedicase. Igual le cuento lo de que soñé que me palmeaba la espalda y desde ese día cocino mejor.

Así que intentaré escaparme a la sala de prensa y escribir a poco que pueda desde allí.

¡Besos mil y hasta la vuelta!

miércoles, enero 12, 2005

Antonio Gala, mon amour…

Volvía a mi hotel, cruzando una calle paralela a la Castellana, cerquita del Bernabeu. Y pasó delante de mí. Su porte elegante, pañuelo al cuello, su bastón… Lo tuve a dos palmos. No había nadie en la calle. Podría haberle alcanzado, podría haberle hablado, pero me quedé parada, quieta, viendo cómo se alejaba, cómo se iba haciendo pequeño y desparecía dejando sólo su halo en mi retina. Seguí parada allí, clavada al asfalto y empecé a maldecirme, por no haberme acercado. Él era Antonio Gala y yo tenía 22 años. Si me dieran unas horas para compartir con quién yo quisiera que estuviera vivo, sería él quien encabezaría esa lista, pasando por delante incluso de mi futuro cuñado Enrique Bunbury..

Ayer le vi en Antena 3 con Buenafuente, (que alegría que el resto de la península también podáis disfrutar de este crack irónico televisivo. Andreu eres un genio). Volví a pensar en ese instante en mis madriles de mis amores. ¿Qué le hubiera dicho? ¿qué hubiera dicho? Hoy me hubiera puesto de rodillas y le hubiera pedido permiso para besar sus manos, le hubiera dicho que es delicatessen en estado puro, que convierte en oro los minutos que regala con su presencia, que yo nunca tiraré la toalla aunque la mía todavía sea de baño extragrande y no de bidé como aseguró que es la suya ahora. No sé que le diría, pero le hubiera parado. Con qué gracia y medio timidez de alumno bien amaestrado corrigió a los Estopa. Buenfuente les preguntó: ¿conocíais a Antonio Gala? Uno de los hermanos dijo tímidamente que se habían visto entre bambalinas medio titubeando. Gala dijo muy concentrado y en bajito: Nooo, teníais que haber dicho que habías oído todos mis discos y yo os tenía que contestar que yo había leído todos vuestros libros. “Ya, maestro, pero no me he atrevido”. Soltó el cantante con una timidez que jamás hubiera yo imaginado.

Lo tengo claro. Antes de que yo me muera tengo que verle de nuevo. Él no tiene problemas porque sea tarde o muy tarde porque los dioses nunca mueren.

PD: Andreu Buenafuente tiene su propio blog: Haz click en Diario

martes, enero 11, 2005

Alegria...

La alegría llegó a través de la línea telefónica. Estábamos Sufumu, Lara Norris y una servidora y hacía unas horas que habíamos hablado con ella, pero la volvíamos a echar de menos así que dijimos… ¿la llamamos? Ya habrá entrado a ver al tío por la tarde. Al otro lado del teléfono la teníamos, nuestra amada madre, nuestra Samarcanda del alma…

¡Me ha sonreído! Asentía con la cabeza. Le he dicho que le quería mucho y me guiñaba el ojo. Mira ahora me toca a mi estar al otro lado del cristal como tú has estado conmigo. Ahora te cuido yo y hasta que no estés bien aquí estaré. Me intentaba hablar. Le tranquilizaba y le decía que escuchara que ya podría hablar prontito. Sabía que Sufumu le había ido a ver y sonrió. Seguro que recordaba cuando le dijo anda tío que esto parece una cárcel y los enfermeros carceleros que nos dejan poquito tiempo. Niñasss que estoy muy contenta….

A las tres nos brillaban los ojos de alegría. Nos contagió. Estábamos como flotando. Hoy nos ha vuelto a dar buenas noticias. Los médicos han dicho que respira un poco por él. Que con mucha ayuda de las máquinas, pero que va reaccionando. Volvemos a estar contentas. Pero uf como se llega a echar de menos a esta bandida.

Después de cenar, ya con mi marido incorporado al club de la felicidad, empezamos a divagar sobre la subida de sueldo de este año. Es la época de las reuniones, de los presupuestos y hay que tener el discurso preparado. Empezamos con la Sufumu y nos dieron las once y ya no pudimos seguir conmigo, pero valió la pena. Cómo nos llegamos a reír. Tú lo que tienes que decir es que qué es lo que hay que hacer para que te suban el sueldo en esta empresa… Sí, sí pero se lo dices con cara de viciosilla. No mejor ya te pones directamente de rodillas. Empezamos a degenerar y yo sin mi discurso. Egoístas que de mi discurso no habéis hablado. Pues vale ya lo tengo. Oye que si me subes el sueldo la Sufu vendrá y…. Si hombre aquí que cada vela aguante su verga.

Os tengo que confesar una cosa, dije casi al final de la jornada. ¿Os acordáis del jostión que se pegó la Sufu en la calle, cuando a punto estaba de salir para Valladolid? Sí, sí todavía tiene las rodillas moradas. Pues eso. Que no se cayó.



PD: Hay una carta de Samarkanda en su blog recién traída desde Valladolid